lunes, 18 de junio de 2007

Iniciando la vida sexual

Por Paola Farías
“Había conversado del tema con mis amigas y sólo quería que fuera con el hombre de toda mi vida. Algunas me trataban de cartucha, pero eran mis ideas y mi familia, a la cual adoraba, me había comunicado esos valores. El día que lo hice fue con mi pololo, era el segundo, antes había tenido un pololo pero sólo nos habíamos dado besos y una que otra caricia más íntima. La verdad es que tengo una impresión rara de mi primera vez, tengo la impresión de que no fue lo que soñé pero tampoco fue malo” Francisca, 21 años.
El inicio de la vida sexual tiene fuertes implicancias morales y psicológicas. Por una parte, está el deber ser de quien se inicia: la vida sexual “debe” iniciarse con la persona que amas, en un clima de respeto mutuo, con las precauciones de higiene necesarias. Por otra parte, está toda la temática que tiene relación con la construcción de identidad, con el tema de la valoración del cuerpo, con el tema de aprender a dialogar corporalmente.
Ciertamente, el inicio de la vida sexual no se da en abstracto o de espaldas al contexto social en que ésta se lleva a cabo. No es lo mismo el inicio de la vida sexual en un contexto más bien autoritario y represivo hacia todo lo referente a lo sexual, que en un contexto más abierto y tolerante. Tampoco es lo mismo iniciar la vida sexual en un contexto urbano que un contexto rural; en un contexto de sociedad más avanzada en términos tecnológicos y de mejor pasar económico para el promedio de sus habitantes, en un contexto social más precario en todos los aspectos señalados.
El tema sexual, desde los inicios de la modernidad se fue transformando en un tema de interés no sólo para las religiones u otras organizaciones preocupadas de los aspectos morales de la sexualidad, hoy es un tema de preocupación política. El Estado, a través de sus instituciones también toma el tema sexual como parte de su agenda: ya sea para favorecer un clima informado, tolerante y respetuoso para su práctica, ya sea para intervenir autoritariamente en la práctica sexual de los ciudadanos. Hoy en día, en nuestro país, todas las instituciones y organizaciones preocupadas del tema de la vida sexual de los chilenos señalan que la edad de iniciación sexual es cada día más temprana en comparación a generaciones anteriores. Hay consenso en los especialistas en que los procesos de modernización que ha vivido el país en los últimos diez años han transformado los comportamientos sexuales de los chilenos y se percibe que hay mayor tolerancia a tener una vida sexual sin estar casados o bien iniciar una vida sexual con personas del mismo sexo. Este clima de tolerancia hace que, no obstante algunas mujeres provenir de hogares muy conservadores en materia sexual, inicien su vida sexual con algún grado de soberanía sobre sí mismas. Y no sólo sobre el hecho de tener intimidad sexual con otra persona, sino que abrirse a la experiencia de la masturbación como método de autoconocimiento sexual. La vida sexual implica todo un compromiso que va más allá de lo estrictamente corpóreo y por ello la importancia de que esta se de en un clima de dignidad a objeto de reforzar la autoestima.

Keywords

Precauciones higiénicas: medidas para prevenir el contagio de enfermedades de transmisión sexual y el VIH-SIDA
Inicio de la modernidad: Se ha llegado al consenso de que el siglo XVIII marca el inicio de la modernidad, donde el hombre centró sus esperanzas en la ciencia y la racionalidad para alcanzar grados crecientes de felicidad y bienestar.
Autoestima: Se refiere a esa confianza y la energía que se irradia desde el interior que nos impulsa a hacer cosas en el convencimiento de que podemos hacerlas. Guarda relación con el conocimiento que tenemos de nosotros mismos, del cariño que nos tenemos y de cómo al constatar ello, podemos darnos a los demás.

1 comentario:

EL HOMBRE ES CIENCIA dijo...

Su artículo es muy bueno, refleja los temas asociados a la iniciación sexual en las mujeres.
Una de las cosas más importantes y que aún es poco considerada es la educación sexual. Las mujeres muchas veces, por falta de conocimiento, o porque no se atreven a solicitarlo de su pareja, no se protegen con preservativo y se exponen a muchas enfermedades.
Quizás falte mucho aún para generar más conocimiento y confiaza en sí mismas para que las jóvenes tomen precauciones adecuadas respecto de su cuerpo y su futuro.